Estilo
Una chica de 30 años vendía billetes de avión: se tomó dos años libres y escribió una de las novelas más relevantes de la historia
Y, en realidad, casi toda su carrera como escritora se conforma con un único título. Tuvieron que pasar 55 años hasta que publicó su segundo libro. Y otros diez años para el tercero


En 1949, una joven de 23 años se mudó a Nueva York desde su Alabama natal para ganarse la vida. Ella quería ser escritora, pero para mantenerse aceptó varios trabajos. Primero, en una librería y, posteriormente, como agente de reservas de vuelos. Escribía en sus ratos libres y llamó la atenci…
Artículo original publicado en SensaCine





















