Apoyo controvertido de la UCR San Luis y Poggi a la represión policial en Jujuy

A raíz de los recientes acontecimientos en la provincia de Jujuy, donde la Policía ha sido objeto de duras críticas por su accionar represivo contra manifestantes, el apoyo de la Unión Cívica Radical (UCR) de San Luis y su relación con el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, han generado polémica y señalamientos de autoritarismo. Desde distintos sectores de la sociedad y de asociaciones de derechos humanos, se han levantado voces de repudio ante las imágenes de la violenta represión policial en Jujuy, que han sido ampliamente difundidas en redes sociales y medios de comunicación. Las manifestaciones populares exigían el respeto a los derechos civiles y la transparencia en la gestión gubernamental.En San Luis, las contradicciones han estado a la vuelta de la esquina sobre todo  con el binomio Avanzar – UCR. Luego de una visita polémica de Gerardo Morales, orquestada por el rector de la UNSL, Victor Morinigo y Claudio Poggi. Ambos fueron los orquestadores de un lanzamiento político que fue dibujado como un acto institucional. El papel del gobernador Morales ha sido objeto de especial escrutinio. Su postura en defensa del accionar policial ha sido cuestionada por varios sectores de la sociedad, quienes lo acusan de respaldar medidas represivas en lugar de promover el diálogo y el respeto a los derechos humanos.Además, las críticas apuntan a la estrecha relación política que Gerardo Morales ha establecido con el jefe de gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta. Esta alianza ha sido fuertemente señalada como un intento de consolidar el poder político, pero a costa de socavar las libertades civiles y los derechos del pueblo jujeño.La UCR de San Luis, por su parte, ha sido acusada de avalar esta actuación policial y respaldar la postura de Gerardo Morales. Diversos líderes y representantes de la UCR San Luis han defendido públicamente las acciones llevadas a cabo por la Policía de Jujuy, lo que ha generado tensiones internas en el partido y una división de opiniones entre sus miembros.