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Fassi ganó por el 80% en Talleres y se queda en el club hasta 2029
Un sector de la oposición logró colocar asambleístas, pero el mandatario reelecto consolidó su poder y las urnas mandaron un doble mensaje a la AFA y a la política.


Finalmente, Andrés Fassi pudo ratificar su poder al frente de Talleres y se quedó con la elección en la que ponía en jaque su continuidad. El arrollador 80% que obtuvo de los más de 11 mil socios que acudieron a votar convirtió al empresario en el más votado de la historia de los clubes del interior del país y uno de los más elegidos a nivel nacional. Por caso, superó a Mauricio Macri en la primera elección en Boca en el ’95.
El armado oficialista con el que Fassi buscó su re-reelección, ‘Adelante Talleres’, se impuso a ‘Talleres somos todos’, el esquema que llevaba como candidato al funcionario municipal Román Huespe (14%) y a ‘Talleres es de su gente’, que llevó como postulante a Adrián Gruppi (5%).
En medio del peor año en lo deportivo para el club en el último tiempo, y después de un 2024 en el que coqueteó y mucho con la posibilidad de incursionar en la política dentro del esquema de Javier Milei, Fassi logró consolidar su poder al frente del club de barrio Jardín y sepultó cualquier atisbo de sectores de la oposición por condicionar su poderío. Incluso, y en silencio, están los que creen que desde las urnas pudo mandar un mensaje en dos direcciones: a la AFA y al poder político que quiso limitar su continuidad al frente del club.
Sobre todo, porque la primera elección en 11 años en el club tenía los condimentos de la tensión entre Fassi y ‘Chiqui’ Tapia, con el visible fuego que disparó en distintos momentos el tesorero de la entidad madre del fútbol argentino, Pablo Toviggino. Y porque una de las listas, sin tanta injerencia en el último tramo, es cierto, tenía a gente del cordobesismo detrás como era el armado liderado por Huespe.
Sin embargo, Huespe, funcionario municipal y de vínculos con varios actores del peronismo provincial logró colocar 15 asambleístas. Objetivo a largo plazo si se tiene en cuenta que la lista de Fassi alcanzó 135 y desde allí también podrá retener el joystick con una mayoría abrumadora.
De todas maneras, las decisiones de las últimas semanas mostraron una muñeca política en Fassi que entendió cómo desde varios sectores buscaron rodearle la manzana. Días antes de la elección relegó a su hijo Sebastián, apuntado y criticado desde varios ámbitos, al que el propio presidente llegó a decirle públicamente “tal vez te expuse demasiado”; y, una vez consumado el triunfo, llamó al consenso tras ganar con más del 80% de los votos.
“El adversario a vencer está afuera, no está acá adentro. Acá adentro tenemos que fortalecernos unidos y eso es lo que trataremos de hacer absolutamente con todos los que no nos votaron”, dijo el mismo domingo por la noche y llamó a conversar a los otros dos candidatos.
Así, Fassi se quedará en Talleres hasta el 2029 y logró sortear varios escollos. Tanto dentro como fuera del fútbol, donde todavía le queda un elemento clave en la gobernabilidad: que Talleres se salve del descenso.




















