La encrucijada de Hissa y su vacío de poder antes de asumir

Por estas horas en la Legislatura provincial se trabaja en la conformación de una nueva Ley de Coparticipación. Por pedido de distintos intendentes, el bloque del oficialismo inició el desarrollo de un proyecto para mejorar el reparto más equitativo y discrecional de fondos. 

Con este panorama se abre una interrogante sobre el papel de la oposición y específicamente sobre el líder de esa bancada, el actual diputado e intendente electo, Gastón Hissa. 

El Poggismo se ha manifestado en contra de cada proyecto del oficialismo. Incluso en algunos ni siquiera formaron parte de la votación. Esta posición adoptada es la génesis de una encrucijada que deberá sortear Hissa. 

Estamos hablando de qué tendrá que decidir si deja a su futura gestión sin más recursos, que no llegarán a los vecinos y vecinas de la capital puntana. O bien, le patea el tablero a su líder político (Claudio Poggi) y acompaña el proyecto del oficialismo, que va a beneficiar su futura gestión. 

Hissa nunca fue de la mesa chica de Poggi, integra la tercera línea de dirigentes que forman parte de Avanzar. En el entorno del poggismo, nunca le tuvieron confianza y hoy en lo que será su proyecto municipal lo dejarían a su libre albedrío. Algo que de entrada le generará un vacío de poder. 

En este espacio, hemos comentado con anterioridad que el “turco”, como le dicen sus cercanos, ha tomado la decisión de armar una Municipalidad de amigos y dejar afuera a sus aliados políticos, como la UCR. Solo algunos convidados de la gestión de Martín Olivero de La Punta, serán parte del Municipio capitalino. 

En los próximos días Hissa tendrá que definir su postura, si atenta contra la actitud totalitaria de su espacio político o elige perder recursos que serían beneficiosos para la Ciudad.